Diversos tratamientos de logotipo de la marca Carhartt. ¿Cuál piensas que habla de «ropa de trabajo prémium»?
4. Perfilado de clientes
El «perfilado de clientes» es como se llama en marketing el proceso de conocer a tus clientes. Más en concreto, significa: ¿qué quieren de ti? ¿Qué problemas les resuelves? ¿Qué consideran un éxito? ¿Cómo les gusta comprar? ¿Cómo encaja en sus vidas lo que haces?
Aunque se puede gastar mucho dinero en el perfilado de clientes (conocer tu mercado), basta con escribir un perfil simple de cada «tipo» de cliente para focalizar tus comunicaciones de publicidad.
Puede ser tan simple como identificar que tienes dos tipos de clientes, hablando a grandes rasgos:
- personas de cuarentaitantos, con posibles, propietarias de sus viviendas y que quieren invertir en un nuevo diseño completo del jardín
- personas jubiladas, propietarias de sus viviendas, pequeñas casas en las afueras, que necesitan ayuda para el mantenimiento del jardín.
Para reforzar tu idea de quiénes son estas personas y cómo puedes llegar a ellas, contesta a la siguiente pregunta:
- ¿Qué publicaciones leen estas personas?
- ¿Qué redes sociales usan?
- ¿En qué fuentes confían?
Quizá descubras que la forma más rápida de llegar al primer «tipo» de cliente es con un perfil interesante de Instagram acerca de tu trabajo, mientras que el segundo «tipo» de cliente confía en el boca a boca y lee la prensa local. Así obtendrás pistas para dirigirte a tu prototipo de cliente potencial o incluso para identificar tipos de clientes nuevos a los que te gustaría empezar a llegar. También descubrirás por qué quieren contratar un paisajista: ¿por prestigio? ¿Les gusta la naturaleza? ¿Se están preparando para vender su propiedad? ¿Tienen familia? Esto te ayudará al hablar de tus servicios con un mensaje o una publicación que encaje con tus clientes.
5. Estudio de mercado
De la misma manera que dominas tu negocio por dentro, deberías conocer a fondo a tu competencia. Toma dos empresas de la competencia locales y contesta a las siguientes preguntas:
- ¿Quiénes son?
- ¿Qué servicios ofrecen?
- ¿Qué áreas cubren?
- ¿En qué se diferencian de ti?
- ¿Qué tipo de clientes buscan?
- ¿Su página web es más profesional?
- ¿Son más baratos?
- ¿Están centrados en un tipo particular de proyecto de jardinería?
- ¿Están en redes sociales?
- Identifica las lagunas y las áreas en las que puedes mejorar.
Te ayudará a seguir siendo competitivo.
6. Tener un plan
Al trabajar en el paisajismo, estarás acostumbrado a seguir el ritmo de las estaciones y adaptar el trabajo según el tiempo. De la misma forma en que piensas en las estaciones para tu negocio, tienes que pensar en ellas para la publicidad.
Escribe un calendario de 12 meses que incluya fechas importantes, campañas promocionales, hitos y momentos clave del año. Úsalo para definir si vas a tener que dedicar más tiempo a alguna actividad de marketing y para consignar los mensajes clave que te gustaría compartir con los clientes potenciales.
Probablemente detectarás tendencias como que las personas invierten en el cuidado del césped entre marzo y octubre o que el invierno es el momento más habitual para planificar un proyecto de reforma del jardín.
Una vez que sabes qué servicios quieren las personas en cada momento del año, puedes prepararte con los correspondientes mensajes promocionales antes de que llegue la demanda. Esto va a dar estructura y claridad a tus comunicaciones, así como garantizar que estás ofreciendo lo que busca la gente y en el momento en que lo buscan.
7. En forma para el largo plazo
La publicidad, tanto en línea como en papel, puede ayudar a tener más pedidos a corto plazo durante el tiempo en que aparecen los anuncios. El marketing —por ejemplo, compartir fotos de tu trabajo en las redes sociales— funciona de forma más gradual a largo plazo. Mientras que la publicidad vende servicios, el marketing ayuda a vender tu «marca»: quién eres, qué representas y qué ofreces. Por ejemplo, es posible que no hayas visto un anuncio de Red Bull últimamente, pero sabes quiénes son y lo que venden. Eso es «hacer marca».
Por tanto, no esperes ver un resultado inmediato al incrementar tus esfuerzos de marketing. Se pueden tardar años en crear una marca, y tienes que entender que el marketing requiere tiempo para dar frutos. La publicidad también funciona mejor si las personas ya reconocen el logotipo o el nombre de tu empresa, de forma que un pequeño trabajo de marketing merece la pena a largo plazo.
8. Las primeras impresiones cuentan
¿Qué impresión quieres causar? ¿Que eres un profesional capacitado y de confianza que se toma su trabajo en serio? Quizá quieras que las personas sepan que eres amable.
Para causar buena impresión, no hay nada peor que una furgoneta sucia y dañada o empleados desaliñados. Asegúrate de que las herramientas, el equipamiento y los vehículos estén tan limpios como sea posible (¡sé realista!) y que los empleados vayan arreglados. Las camisetas y sudaderas de empresa no son caras y ayudan a transmitir una imagen profesional a clientes ya existentes o potenciales.
Explica a tus empleados cómo quieres que se presenten: educados, amables y dispuestos a ayudar.
9. Redes sociales
Uso de las redes sociales en Europa:
- Reino Unido 66 %
- Francia 60 %
- España 62 %
- Alemania 45 %
- Italia 60 %
- Portugal 69 %.
Dentro de la UE, el 57 % de las personas entre los 16 y los 74 años usaron las redes sociales en 2020, 3 puntos porcentuales más que en 2019. Te guste o no, las redes sociales son una fuente de información fundamental para los clientes. Como tales, son una potente herramienta para llegar a audiencias objetivo. Alguien como John Ryan es un magnífico ejemplo de nuestro sector. Su uso es gratuito, de forma que merece bastante la pena configurar un perfil de la empresa en las plataformas que creas que puedes gestionar.